Tuesday, December 4

If you tolerate this then u'r children will be next


No sé si se debe decir algo. No sé si se debe respirar. No sé si debo extender mis alas. Está claro que ni pez globo, ni foca, ni elefante, nos quedamos en animal peludo indefinido robado de un Flickr. Va por ti, sin ofensas y con orgullo. Porque me has dado de tu medicina, esa risa tan sana. Escalar paredes, pisar nieve fresca, soñar con rapelar infinito, perderse entre las nubes y sentir que llueve en tu cara. Eso ocupa mucho más que unos cuantos ceros después de un número entero de una cifra distinto al cero pintado en azul sobre una pizarra blanca.
Falda de tubo, negra, de lycra suave; cabello suelto y cuello perfumado. Sillas anatómicamente correctas con ruedas que quieren hacernos creer que somos libres. Mesa de caoba oscura impolutamente contaminada con Pronto o primo de Pronto, según caché. Luminarias que simulan la luz solar mientras las ventanas ahumadas impiden que tus sueños pellizquen lo más mínimo de realidad. De esa realidad que soñabas en el AVE mientras querías escapar de tu asiento, y un estornudo ajeno te devolvía a la caja viajera.  Inmediatamente seguido de una ojeada al reloj que obligado reposa en tu muñeca, hoy el modelo de reuniones de alto asiento, de las de apretones de manos nada cordiales y sí muy distantes, de las sonrisas protocolarias y los 'qué tal' más vacíos que te han arañado tanto tiempo dentro.
'Son ilusiones, porque todo lo que piensas tú, son ilusiones. Que más da, y así nací. Si vas a morir de vieja, aún te quedan muchos años, no se puede estar pensando y pensando.'

No comments:

Post a Comment